Como decía Bécquer, «El alma que hablar puede con los ojos, también puede besar con la mirada». Y es que una mirada puede expresar lo que los labios callan, ya sea para bien o para mal. El reto del fotógrafo será poder capturar esos ojos parlantes con nuestra cámara.
En el artículo de hoy hemos seleccionado miradas que nos cuentan una historia sin decir nada. Analizaremos lo que nos dice cada una de ellas, a ver si coincide con lo que tú percibes. ¿Aceptas el reto?
20 Miradas que Cuentan su Propia Historia
Canon EOS 6D · 50mm · f/4 · ISO 640
Normalmente, cuando hacemos fotografía de retrato nos gusta seguir la ley de la mirada, dejado aire hacia donde mira el sujeto en cuestión. Sin embargo, cuando el sujeto mira a cámara, la situación es bien distinta porque se produce una conexión entre fotógrafo y modelo.
El vínculo entre una mirada y la cámara es tan potente que también será capaz de convertir al espectador de la imagen en parte de la escena, porque se sentirá directamente implicado en ella. Cuando no hay una mirada directa somos meros agentes externos, pero cuando el sujeto nos mira a nosotros nos sentimos aludidos y ello nos evocará unos u otros sentimientos.